Ambientalistas y funcionarios rechazan se realicen autopsias a cadáveres en lugares públicos

Santiago.-El director de Medio Ambiente de la alcaldía de Santiago, Julio César Martínez, y el encargado de los Cementerios Municipales de Santiago, José Espaillat, consideraron hoy como una vergüenza y una amenaza para la salud de la población que el Instituto Regional de Patología Forense, esté realizando autopsias a los cadáveres en lugares públicos y en presencia de numerosas personas incluidos niños.

Mientras los patólogos se reunieron hoy en Santiago donde discutieron la situación y pidieron que se les busque un lugar para realizar las autopsias o, de lo contrario, tendrán que seguir haciéndolo en sitios públicos, porque la resolución 13914 promulgada el 7 de octubre del 2004 los faculta a hacerlas en las vías públicas cuando las circunstancias lo ameritan.

El director de los Cementerios Municipales dijo que las autopsias deben hacerse en el hospital José María Cabral y Báez y no en los cementerios ni en los lugares donde encuentran los cadáveres.

En ese orden, Espaillat sostuvo que Patología Forense hizo una autopsia en el Cementerio de Arroyo Hondo, de Santiago y que la junta de vecinos de esa comunidad protestó.

El funcionario municipal indicó que, luego, Patología quiso hacer otra autopsia en el Cementerio del Ingenio, pero que las autoridades municipales se lo prohibieron.

“Los patólogos no están para hacer autopsias en cementerios y en lugares públicos porque para eso hay un área en el Hospital”, dijo.

Mientras el encargado de Medio Ambiente del Ayuntamiento local, Julio César Martínez, dijo que hacer necropsia en lugares públicos, como la que se hizo a orillas del río Yaque del Norte, constituye una agresión a los recursos naturales y al medio ambiente.

El ambientalista explicó que los contaminantes que deja el cadáver cuando llueve son arrastrados por las aguas a arroyos, ríos y cañadas y que muchas personas, al hacer contacto con esas fuentes, tienen una alta tendencia a enfermarse.

Martínez dijo que espera que nunca más se realice otra autopsia en la vía pública y mucho menos cerca de un río que sirve de fuente de abastecimiento de agua a miles de personas.