sábado, 19 de noviembre de 2011

Entre los oficiales de policia cancelados por faltas graves hay uno que es sacerdote

Un capellán de la Policía está entre los 20 miembros del cuerpo del orden que fueron cancelados por el Consejo Superior Policial por la comisión faltas y hechos reñidos con la ley.

Entre los cancelados hay tres oficiales que desertaron, tres que se dedicaban a extorsionar a particulares, y otros por hacer disparos al aire, ofrecer informaciones internas a delincuentes y hasta por tener amistad con prófugos.

La oficina de relaciones públicas de la Policía explicó que el sacerdote cancelado es el capellán de esa institución Lucas Lappost Avila, con rango de segundo teniente, suspendido en su ministerio sacerdotal por el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, quien es el obispo castrense.

Los cancelados por desertar son el primer teniente Fernando de los Santos (La Soga), acusado de sicariato en Santiago; el sargento mayor Francisco Mora Vallejo, quien abandonó las filas policiales el 17 de octubre, cuando cumplía una sanción de diez días de arresto por faltar a su servicio.

También fue cancelado por desertor el primer teniente Pablo Tolentino Genao, quien se fue a vivir a Estados Unidos.

Por extorsión fue cancelado el segundo teniente Dennos Silverio Sensión, quien cobró 20 mil pesos a Luis Sandro Solaris Estévez para dejarlo en libertad, tras apresarlo con una yipeta con la chapa del chassis alterada.

También fueron cancelados por extorsión el primer teniente Richard Santos de los Santos y el segundo teniente Juan Miguel Ramírez Ozoria, quienes cobraron dinero a un ciudadano apresado en las proximidades del aeropuerto internacional Las Américas, con un arma de fuego.

Otros cancelados son el mayor Miguel Ángel García Rodríguez, por haberse comprobado que mantenía vínculos de amistad y contubernio con personas de “mala reputación”, entre ellos Reymin Severino Castillo (Arsenio), y Quintito Rondón Heredia (Fon), quienes eran buscados por la comisión de delitos.

En retiro forzoso fueron puestos los capitanes Juan Víctor Ramírez y Fernando García Sánchez.

Ramírez fue separado de la institución por haberse determinado que cobró 20 y 10 mil pesos a los segundos tenientes Nicolás Paniagua Dotel y Luis Veris Valdez de los Santos, para que les gestionara ascenso de rango.

El capitán García Sánchez fue puesto en retiro forzoso por dedicarse a gestionar la venta de armas de fuego.

En tanto que se recomendó la cancelación del nombramiento del primer teniente Abelisario Pérez García, por haber declarado ante un tribunal que no recordaba a un imputado por asuntos de narcotráfico, pese a que se encontraba de oficial del día y firmó el acta de registro.

La institución del orden canceló también el nombramiento del primer teniente Mauro Alexander Sosa, por haber sido sometido a la justicia por ante el Procurador Fiscal de la provincia Santo Domingo, imputado de homicidio involuntario en perjuicio de Yurendy Peralta Carrasco, por cuyo hecho fue condenado a quince años de reclusión en mayo por el Segundo Tribunal Colegiado de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia del Departamento Judicial de Santo Domingo.

De igual manera, fue cancelado el nombramiento del segundo teniente Miguel A. Cabrera Peña, por haberse determinado mediante investigación, que mantenía una estrecha vinculación con los hoy occisos Julio Céspedes Martínez (El Indio), y Juan Carlos Céspedes Martínez (Pimpe) quienes se dedicaban a matar por encargo y al narcotráfico.

La Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional lo condenó a 20 años de prisión.

Otros retirados fueron sargento mayor Francisco Mora Vallejo, por desertar, y el sargento Desiderio Concepción Castro por ser reincidente en realizar disparos al aire cuando está ebrio.

EN NUMERO

167

Policías

Entre ellos tres coroneles y otros oficiales superiores, han sido cancelados de la institución del orden durante lo que va de año, por la comisión de faltas graves o por haberse involucrado en hechos delictivos.

UN APUNTE

Polanco Gómez

El mayor general José Polanco Gómez se ha convertido en un terror para los miembros de la Policía que se apartan de las normas del cuer po del orden.

Sólo en los tres primeros meses de esta año, Polanco Gómez canceló 56 agentes que cometieron faltas.

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