San José de Ocoa.-Los aguaceros dejados por el huracán Irene causaron estragos en el Sur. En San José de Ocoa, el puente entre Rancho Arriba y Sabana Larga fue afectado por el río Ocoa, incomunicando a esas localidades.
Específicamente, las corrientes del río derribaron los aproches a ambos lados del puente construido hace apenas año y medio a un costo de 1.2 millones de euros (108 millones de pesos), según dijeron autoridades locales. Esta situación preocupa, igualmente, a decenas de productores de Rancho Arriba, Naranjal, La Ciénaga y Sabana Larga, quienen ya llevan tres días sin poder vender sus rubros.
Aneudy Ortiz Sajiun, alcalde de San José de Ocoa, criticó que los ingenieros a cargo de la obra se limitaron a buscar soluciones que en nada contribuyeron a resolver de forma definitiva el problema. Dijo que nunca se tomó en cuenta el caudal ni la presión de las aguas del río Ocoa, situación que a su juicio provocó nuevamente el derrumbamiento de los aproches del puente.
“Se hizo un levantamiento y se trajo la solución de unas piedras que habían utilizado en otros países y esto no sirvió de nada”, dijo Ortiz Sajiun. En su opinión, la solución es hacer un empalme con características similares al tramo del puente que aún queda sin derribar, y que toda la edificación sea reforzada con gaviones de piedras que sirvan de refuerzo.
Ayer, las autoridades locales sostuvieron un encuentro con la participación de productores de la zona para discutir posibles soluciones y evaluar el impacto que en términos económicos provocará la incomunicación de esas comunidades. En el municipio de San José de Ocoa hay 120 familias refugiadas en tres escuelas que fugen de albergues.
SAN CRISTOBAL. Los residentes en Cambita, Carvajal y Moscú iniciaron ayer el día sacando agua de sus casas inundadas. Algunas viviendas, como la que habitaba Salvador Carvajal, quedaron sepultadas bajo tierra y piedras. Este hombre vivía en el barrio El Cajón, en Cambita, y fue hallado muerto en su casa, la mañana del pasado miércoles.
Miguelina Esmeralda Pérez, de 19 años, perdió la vida la mañana del martes cuando se disponía a cruzar una cañada y fue arrastrada por la corriente.
DRAMA EN EL TABLAZO
En una comunidad llamada El Tablazo el drama no es menos penoso. Esta comunidad está ubicada cerca del río Nigua y de tan solo ver el cielo nublado sus residentes comienzan a sentir temor por el peligro que representan las crecidas. “Los niños ni siquiera pueden ir a la escuela, porque no pueden cruzar al otro lado del río”, comentó Marino Nivar, residente en esa localidad. Por igual, quedan atrapados los adultos, quienes no pueden desplazarse fuera del entorno.
El Caribe
viernes, 26 de agosto de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario