viernes, 22 de julio de 2011

Informe wikileaks crea contradicciones

Santo Domingo.-Varios sectores difirieron ayer sobre la denuncia del portal WikiLeaks que acusa de corrupción al vicepresidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Rafael Luciano Pichardo, por supuestamente haber recibido US$40 mil para subvertir la decisión final en el caso del fraude del Banco Intercontinental (Baninter).

El presidente del alto tribunal, Jorge Subero Isa, defendió la honorabilidad de Luciano Pichardo, y desmintió que haya dicho que este recibiera la referida suma de dinero.

Durante una rueda de prensa conjunta en la sede de la Suprema Corte de Justicia, Subero dijo que Luciano Pichardo“ ”merece el respeto no solo de él, sino de toda la sociedad, y que le debe lealtad y respeto”.

Reconoció que en algunos casos ambos han tenido diferencias, pero que las mismas han sido en el campo laboral, y las han resuelto por medio de conversaciones en su momento.

“Luciano Pichardo es un hombre serio y a mí me consta, yo soy un hombre leal”, indicó.

Desmintió haberle dado al embajador de Estados Unidos de ese momento, Hans Hertell, las declaraciones que se le atribuyen, y aseguró que hay inexactitud en las informaciones de WikiLeaks, porque no se establece dónde ni en qué fecha fueron.

Dijo que él no solo ha hablado con la embajada de Estados Unidos, sino con otros organismos de colaboración, pero todo lo que ha expresado ha sido en el plano laboral.

Se defiende de acusaciones

En tanto que Luciano Pichardo se defendió de las acusaciones que indican los cables de WikiLeaks y dijo que en sus 40 años de ejercicio profesional jamás ha cometido actos de corrupción. Invitó al país y a la sociedad a que le demuestren la comisión de algún acto incorrecto

Tras calificarla como una “monstruosa mentira”, dijo que son medios irresponsables e informaciones falsas.

Manifestó que esas mentiras se producen en momentos en que serán electos los miembros que conformarán los nuevos tribunales, entre ellos el Constitucional, del cual él era el favorito para ocupar la presidencia. Atribuyó las acusaciones a que él se opusiera a la desestimación del caso Sun Land.

Al desnudo

De su lado, el presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez, manifestó que los gobiernos tendrán que revisar y revolucionar en cuanto a la forma de ejercer la diplomacia de un país en otro.

Dijo que las informaciones que han salido publicadas en WikiLeaks ponen al desnudo la forma en que muchos países practican el ejercicio diplomático. Señaló que las denuncias del portal sobre el presidente y vicepresidente del tribunal de alzada, Subero Isa y Luciano Pichardo, no tienen por qué afectar al país.

Otras reacciones

De su lado, el canciller Carlos Morales Troncoso le restó importancia al caso y calificó el portal como “Wikichisme”.

Aseguró que desde principios de año lo único que se ha buscado es dañar reputaciones.

En tanto que el candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Hipólito Mejía, consideró que por la gravedad de las acusaciones y la alta investidura de las personas involucradas éstas están llamadas a fijar su posición y aclararlas.

El exmandatario dijo no albergar temor alguno en aparecer en uno de esos documentos, pero que si es mencionado responderá con la transparencia que siempre le ha caracterizado.

Vincho dice es ‘perversidad’

Marino Vinicio Castillo (Vincho) calificó como una “perversidad horrible” las informaciones reveladas en los cables de WikiLeaks. “Yo no creo en lo absoluto que haya un mínimo de verdad en lo que afirma”, dijo.

En cuanto a las acusaciones que pesan en cuanto a él, dijo que “hay una perversidad horrible, porque no tengo ni los medios ni la manera para cambiar un presidente por un vicepresidente, y no son mis funciones, son de la magistratura, que participan el presidente de la Suprema Corte de Justicia, y otros jueces”.

Castillo se refirió a que supuestamente estaba gestionando la sustitución del presidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Subero Isa, para que pusieran en su lugar al vicepresidente de ese organismo, Rafael Luciano Pichardo.

Sostuvo que el propósito de revelar estas informaciones “no está a la vista nunca. Hay un comportamiento mafioso, que se define en el mundo como un tipo de guerra de gran intensidad y de baja visibilidad”.

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