Desde Madrid

Deux ex machina

Por: Balbina Negreira
La autora es abogada

La aceptación sin más explicación ha sido nuestra esclavitud como nación.


La expresión latina Deux ex machina, “actualmente utilizada para referirse a un elemento externo que resuelve una historia sin seguir su lógica interna”. (Wikipedia).


Creo en los fenómenos sociológicos que se dan en la sociedad a veces sin más explicación. También creo que dos más dos no son cuatro. Pero, además creo que, estos fenómenos pueden ser manipulados, movidos, modificados y direccionados a nuestra voluntad.


La legalización del aborto no es un hecho en la república dominicana todavía, porque la Iglesia Católica tiene una influencia en nuestro país que traspasa el ámbito religioso. Considero que esto no es un descubrimiento y todos(as) lo sabemos.


Como persona que tiene el privilegio de vivir en la era de las tecnologías y creyente en las ciencias como fórmula de entendimiento de “esos pequeños detalles” que hace 20 ó 30 años pasaban sin más cuestionamientos que decir “ganó”.. Aceptémoslos. Amén.


Como aceptamos la inseguridad ciudadana. Que el narcotráfico se adueñe del país. Que la corrupción en el Estado sea normal porque “a eso es que van y si fuera yo hiciera lo mismo “. Que aceptamos un cuarto de siglo sin energía eléctrica.. Esto sí es una fiel descripción sociológica muy ligada al subdesarrollo y, por ende, al analfabetismo conveniente por parte de los que nos han “gestionados y gestionan” como país.


Con este remedio casero, o preparado empírico de análisis, fue presidente un montón de veces Joaquín Balaguer; nunca se concluyó la manera de, -¿cómo demostrarlo? Siempre se atribuyó y, de hecho así, surgió una leyenda urbana a comportamientos sociológicos (de la clase pobre) por la fundita de comida que regalaba, a los “huacalitos” sin ningún pudor en la administración pública; a la Cruzada del Amor y, al color de piel negro, o a que los “americanos” no lo querían como Presidente .


Me refiero al fenecido líder del PRD, Dr. José Francisco Peña Gómez. Estigmatizándolo con un stop, hasta aquí puedes llegar: líder nacional jefe de las “masas irredentas” del partido”; líder internacional para que busque ayuda para el país y ponga en el mapa mundial a la República Dominicana, pero no presidente.


Esta réplica, y para que no haya malos entendimientos, no estoy haciendo comparaciones en lo político; le han hecho y le quieren hacer a Miguel Vargas, “un empresario no puede ser presidente”. Un “empresario” que estoy segura hará más por los barrios de Capotillo, Gualey, Villa Juana y, así sucesivamente que, la gran mayoría de los autodenominados políticos innatos, debido a que ya es “sabiduría popular” a lo que van, al menos, la corte que lo acompaña al Palacio Nacional.


He sido sorprendida cómo en apenas 48-72 horas algunos(as) articulistas que apoyaban la puesta en escena del proyecto de Miguel Vargas; recomiendan o sugieren ahora de aceptar los hechos puro y simple. Sin más explicaciones.


El PRD como un partido democrático tiene la obligación de que cada uno de sus actos y acciones sean correctamente contrastados sin la sombra de las dudas y las especulaciones. No “complicar las cosas” no es excusa ni amenaza a la institucionalidad y unidad del partido; al revés, para que esto funcione se debe hacer sin prisas ni presiones mediáticas.


De comprobarse la “contaminación del proceso convencional perredeísta”, la reflexión y el remordimiento de conciencia que me quedaría sería de que, se pensaba cometer un delito y una injusticia en perjuicio de la candidatura presidencial de Miguel Vargas.


Honestamente, pienso y opino que, nuestro deber y obligación es en principio de que se aclaren los hechos, se proclame al ganador y, luego izar la bandera blanca de la Unidad.


El ex presidente Hipólito Mejía ya debería para hacer honor a la palabra Unidad; haber dicho también, pues, verifiquemos lo acontecido en la convención.


No quiero pensar que sólo le interese saber que, “ganó” sin saber,-¿cómo?

Madrid-España.