El Cairo.-La insurrección en Egipto tomó hoy un nuevo y peligroso cariz, cuando miles de partidarios del presidente Hosni Mubarak, algunos a caballo o camello, atacaron a latigazos a los manifestantes antigubernamentales. Los dos bandos intercambiaron pedradas y los manifestantes arrancaron a los atacantes de sus monturas.Fueron los primeros hechos de violencia significativos entre partidarios de ambos bandos después de más de una semana de manifestaciones. Comenzaron después que Mubarak rechazó anoche por televisión los reclamos de su renuncia inmediata y aseguró que cumpliría los siete meses restantes de su mandato.
El comienzo del choque. El miércoles por la mañana, un vocero militar pidió por televisión a los manifestantes que se dispersen para que la vida pudiera regresar a la normalidad. El anuncio significaría un viraje significativo en la actitud del ejército, que durante los días anteriores permitió el crecimiento de las manifestaciones. Ayer, un cuarto de millón de personas ocuparon pacíficamente la céntrica plaza Tahrir (Liberación).
Casi 10.000 manifestantes regresaron a Tahrir esta mañana, rechazaron el discurso de Mubarak por tardío e insuficiente y reiteraron sus reclamos de renuncia inmediata del presidente.
Los primeros enfrentamientos. A primeras horas de la tarde, una periodista de la Associated Press vio a partidarios de Mubarak atravesar una cadena humana de manifestantes contra el gobierno que intentaba proteger a los miles congregados en la plaza Tahrir. Arrancaron carteles que denunciaban al presidente y se produjeron enfrentamientos. Algunos quedaron heridos y sangrando de la cabeza.
Casi inmediatamente después que Mubarak anunció que cumpliría su mandato y no abandonaría el país, grupos de partidarios suyos salieron a la calle. Algunos llevaban cuchillos y palos.
En Alejandría, los choques comenzaron inmediatamente después del discurso de Mubarak.
Salir de Egipto. Una cordobesa y sus hijos tres hijos estaban de vacaciones en Egipto cuando se desataron las masivas protestas contra el presidente Mubarak.
Marisa contó la odisea que le tocó vivir para dejar el país africano y criticó a la embajada argentina, ya que las autoridades no los ayudaron a regresar (Ver La odisea de una cordobesa para salir de Egipto).
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