El Infinito Placer de ser Mujer
Doris Sánchez
La autora es abogada sanjuanera que vive en España
Dios decidió que esa semillita insertada en el vientre de mi madre tenga por sexo mujer. Nací y crecí teniendo bien claro el papel de ambos sexos. Para nada contemplo que tenga que haber necesariamente una rivalidad entre ambos sexos, todo lo contrario el hombre y la mujer se complementan y juegan un papel fundamental en la família ya sea como padres o como hijos. La responsabilidad es compartida y entiendo debe haber respeto mútuo, reconocimiento y valoración.
Me enseñaron desde muy pequeña a cuidar mi pudor, preservar mi intimidad y a ver a los niños como algo normal y parte de mi infancia. No es asunto de quien puede más, no es una competencia, no me ha interesado más que mi propia superación y demostrarme a mí misma lo lejos que puedo llegar para lograr mis objetivos, valoro el papel del hombre mucho más cuando es amoroso y su ternura me enamora, porque los recuerdos más hermosos que he tenido en mi vida primero son los de mi família y segundo los de mis grandes amores. Quien no haya amado no ha vivido en abundancia.
La mujer no debe perder su femeneidad nunca, mucho menos para competir con el hombre, la mujer es tierna, amorosa, con una sonrisa sería capaz de lograr el entendimiento de los líderes del mundo, la mujer tiene don de palabra, poder de convicción, puede ser empleada, madre y esposa en un pris pras, es capaz de alargar las horas del día haciendo magia para cargar con mucha responsabilidad sin perder la sonrisa. Parímos nuestros hijos con amor, vamos y venimos por el mundo pisando fuerte y obteniendo muy buenos resultados en todos los sentidos, y cuando las cosas nos salen mal empezamos de cero sin inmutarnos.
Cuando me calzo unos altos tacones y me paseo por las calles me siento firme y muy mujer sobre todo porque los hombres no me ven como una competencia, todo lo contrario me ven como lo que soy una mujer, para nada discriminada ni irrespetada, soy muy feliz de ser mujer y si volviera a nacer me gustaría volver a nacer mujer.
Que la biblia diga que nacimos de la costilla de un hombre no me ofende, más me gusta que diga que Dios nos creó para ser su compañera, o sea que somos importantes, no todos los hombres pueden estar sólos porque sólos no son nadie, la mujer les dá la fuerza como a sansón se la dió su larga melena.
El hombre es tan necesario para la vida como la mujer, sin su unión no hay procreación aún sea por inseminación, ninguna polémica creo que todo está muy claro y definido, mientras más femeninas somos queremos en nuestras vidas tener hombres verdaderos, auténticos, sinceros, amables, detallistas, fieles, y con mucha hombría porque para femeninas, nosotras las mujeres. Aunque a veces es mejor estar sólas que mal acompañadas, pero esa sería la excepción.
Si aunamos nuestros esfuerzos ayudamos a que el mundo sea mejor y más felíz. Muchas son las canciones que hablan de los hombres y de las mujeres, de la necesidad de estar juntos, que viva la vida, que viva el amor y los que son capaces de aceptar a sus parejas tal cual es, con sus defectos y sus virtudes, cada persona es diferente y nadie querrá compartir su vida con una copia de sí mismo, sería bastante aburrido.
miércoles, 16 de junio de 2010
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Extarordinario artículo. Sabes escribir muy bien y tus ideas son muy claras y precisas. Te felicito.
ResponderEliminarDoris, excelente.
ResponderEliminarSi me lo dicen ustedes que saben de Periodismo lo acepto, intento sacar sentimientos que hay en mi corazón con la complicidad de mi ordenador que lo aguanta todo. Mi destino fué ser periodista, mi madre se opuso, pero algo me esperaba aquí en España y lo estoy disfrutando. Gracias.
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