Construcciones a prueba de terremotos
Por: Edgar Valenzuela
La Ciudad Colonial de Santo Domingo fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1990, 494 años después de haber sido fundada; y desde 1935 se le realizan trabajos parciales de restauración y remodelación, según registran las estadísticas oficiales.
Esa Ciudad Colonial es una muestra de la arquitectura española de la época en que el imperio español impuso a sangre y fuego su dominio político sobre la Isla Quisqueya. Los abusos cometidos para someter a los indios alcanzaron tal magnitud que la raza taína fue exterminada en su totalidad. Igual pasó en Cuba, Puerto Rico, Jamaica y en otras tierras del Caribe.
Aunque condenamos la saña de la conquista, en algo se cuidaron los gobernantes españoles: en la calidad de las construcciones. No sólo son impresionantes a la vista la Catedral Primada de América, el Alcázar de Colón y la fortaleza de la Torre del Homenaje, están sólidamente levantadas hasta el punto de que pueden durar 500 años más.
Han resistido huracanes, terremotos y el paso del tiempo.
Al igual que los conquistadores españoles, Trujillo ahogó en sangre a habitantes de ambos lados de la isla, pero da vergüenza que una dictadura como la suya haya construido mejores obras que la que han patrocinado muchos Presidentes de esta supuesta democracia representativa.
En tiempos de zafra electoral, políticos ansiosos del aplauso fácil y del elogio irracional, levantan al vapor plazas y edificios, sin hacer los estudios geológicos correspondientes ni hacer los planos que resguarden la seguridad pública en caso de terremotos y huracanes futuros.
Tampoco se cuida la calidad de los materiales de construcción.
Lo fundamental es conseguir votos, y protagonismo, no el progreso real de las presentes y futuras generaciones.
Vemos con simpatía el anuncio hecho recientemente por el ministerio de Obras Públicas en el sentido de implementar un plan dirigido a someter a verificación las edificaciones levantadas a partir de los años ochenta, para determinar su vulnerabilidad en materia sísmica.
El plan se realizaría principalmente en los locales que alojan escuelas, centros hospitalarios, iglesias, cuerpos de bomberos y en otros lugares donde reunen grandes cantidades de personas, como cárceles, fortalezas, cines, teatros y estadios.
La medida es resultado del impacto producido por el terremonto de 7 grados del otro lado de la Isla. Ojalá que no sea un bulto para salir en los periódicos, y se corrigan en la práctica los vicios de construcción.
Algunos podrán alegar que algunas de estas opiniones son discutibles. Es posible, Pero si sorprende a los habitantes de República Dominicana otro terremoto, de magnitud 7 grados, no habrá tiempo para ningún tipo de debates. Unicamente para que se salve quien pueda.
El autor es periodista, teatrista y escritor
domingo, 14 de febrero de 2010
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hola. e visto paises como japon k tienen gran insicidencia diaria de movimientos teluricos y nunca tienen problemas en esta semana tubieron uno de 6.6 sin bajas y todo devido al plan de construcion anti sismo a recuerden k esas metropolis tienen trenes subterraneos al igual k grandes torres ect. si sabemos k estamos espuestos a terremostos tratemos de copiar del k sabe y hagamos buenas edificaciones para k no nos agarren asando batata. gracias
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