Los reformistas esperan que su candidato, el primer ministro Mirhossein Mousaviel derrote al presidente Mahmoud Ahmadinejad, que se postula para un segundo período.Mañana domingo se celebran los comicios presidenciales para que los 46 millones de iraníes habilitados para votar, ejerzan el sufragio.
Ahmadinejad, el hombre de mano dura y que goza de gran aceptación en su país, acusó de corrupción a dirigentes que apoyan a Mussavi, entre ellos el ex mandatario Akbar Hashemi Rafsanjani, quien dirigió una carta abierta a la guía suprema, el ayatolá Ali Jamenei, a quien reclamó garantías para el desarrollo de elecciones "limpias".
El presidente de 52 años y electo en 2005, promete continuar sus políticas, entre las que figura su rechazo al estado de Israel y su retórica agresiva hacia Occidente.
El reformista Mussavi, de 67 años, coincide con los demás adversarios del presidente en que Ahmadinejad debería ocuparse más de la crisis económica, del desempleo y la inflación y menos de lanzar diatribas y ganarse enemigos innecesarios en el extranjero.
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