miércoles, 25 de enero de 2012

El dilema de Miguel tiene al PRD vuelto loco y sin idea

La situación por la que atraviesa el Partido Revolucionario Dominicano  (PRD) es muy compleja. Metido de lleno en una campaña electoral por la presidencia de la República el sector de Hipólito Mejía y este mismo, no atinan a definir la mejor forma de tratar la actitud manifiestamente escurridiza de Miguel Vargas Maldonado frente a la candidatura presidencial de Hipólito Mejía, a quien las últimas encuestas dadas a conocer colocan por debajo de su principal contrincante, el licenciado Danilo Medina.

Ayer nueve diputados perredeistas le propusieron a Miguel Vargas que solicitara una licencia como presidente  del PRD  y hoy el comando de campaña de Hipólito Mejia emitió un comunicado en el cual reconoce como positiva la gestión de Vargas, al tiempo que el vocero de Hipólito rechaza el pedido de los congresistas citados.Es una forma de calmar a Vargas y sus seguidores y frenar a tiempo un enfrentamiento que podria ser políticamente fatal.

¿Qu está pasando en el partido blanco? El hipolitismo esta profundamete disgustado con Miguel, pero no saben qué hacer. Miguel no se integra. Hipólito echa chispas por eso. Sin embargo está impotente. La solicitud de los diputados referidos no es mas que una muestra de la irritación frente a la frialdad de Miguel; pero en las altas instancias del hipolitismo se considera que es mejor un Miguel frio que un Miguel en contra, con lo cual se estaría proyectando una división profunda a lo interno del partido que lo llevaría a una derrota segura en los comicios venideros.

El asunto es más difícil de lo que parece. En medio de la situación citada aparecen 42 diputados, entre los que figura el sanjuanero David Herrera, que rechazan la solicitud de licencia que le solicitaron sus colegas de hemiciclo al huidizo Vargas Maldonado.Entonces ahora la cosa queda asií: los diputados que le pidieron la renuncia quedaron de feos, porque hasta el propio Héctor Guzmán, vocero de Hipólito, está opuesto a ese pedido.La idea es llevar el asunto al momento que estaba antes de la famosa solicitud. Es probable que todo quede ahí, a menos que no se produzca una eventual reacción del interpelado, entiéndase Miguel Vargas.
Sin dudas, en política los errores se pagan caros.El maltrato que le fue dispensado a Miguel después de la convención en  la qiue se escogió a Hipólito como candidato presidencial sigue teniendo sus repercusiones negativas.

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