Reconocimiento

Acuérdate de mí…Hanoi

 Por Alejandro María

El autor ers abogado político

Hanoi Sánchez, la  Alcaldesa de San Juan de la Maguana, ofreció un recorrido por la ciudad a los envejecientes que no conocían el San Juan de hoy,

El mejor regalo a un ser querido distante es mandarle recuerdos.”Dámele recuerdos a Jorge, Arturito, Lino,  Pantaleón…”a todo el que pregunte”.

Estar en la memoria de nuestros seres queridos es un tesoro que disfrutamos.”Recuérdame, recuérdame siempre…”

Cuando quien recuerda es una autoridad, es una virtud política que valoramos… porque lo común es que luego de ganar…a olvidar.

Es comentario habitual que el votante es  para las elecciones como el cerdo para la navidad.

En nuestro país es corriente un decir: “los pueblos que no conocen su historia están obligados a repetirla”, se traduce en que los pueblos no tienen memoria. Aunque eso no es cierto porque el desarrollo histórico es dinámico y no tiene que ver con la memoria colectiva.

Hanoi Sánchez,  Alcadelsa de San Juan de la Maguana, una rubia encantadora, sobre todo si Ud. la observa al través de los ojos de Nicolás, su enamorado esposo, que disfruta cada segundo de su existencia en común.

Pues bien, Hanoi invitó a los envejecientes, a que visitaran la ciudad, que disfrutaran lo que ella ha hecho, que conozcan el San Juan de la Maguana  de hoy.

Junto a la invitación dispuso los medios. Un autobús y Ella como guía. Atenciones de Primera.

Cuánta vida en esos ojos casi apagados! Cuantos recuerdos! El corazón no les cabía en el pecho. Recordaron, compararon, sonrieron con lágrimas de la emoción. ¡Cuántas bendiciones para Hanoi! El asunto es que hubo una que creía que  Balaguer aún era  el presidente. A otro no le gustó el busto a Caamaño, recordó a Palma Sola y dijo cosas que deben ser oídas…pero no publicadas.

Uno que otro recordó cuando Trujillo hizo el Arco, el Palacio, el hotel Maguana.

Una atención así, llena de ternura a las navidades y de dicha a la ciudad.

Volver la vista hacia donde están los que se van primero es un llamado a la reflexión y a la gratitud.

Caloricemos nuestra vida con la energía del querer vivir, de  los que ya vivieron y les quedó mucho por hacer.

Que sus vidas sean  ejemplos  para todos.

Que la gratitud de la ciudad simbolizada en Hanoi, llene de luz la vida de todos, de los que se fueron, de los que casi se van y de los que nos iremos… para permanecer en el corazón de los que amamos.

¡ Gracias a la vida!