Una mujer británica de 48 años, Caterine Cartwright, ha terminado en la cárcel por haber ignorado una ordenanza que la obligaba a no hacer tanto ruido mientras mantenía relaciones sexuales con su marido.
Varios vecinos de Wearside, barrio de la ciudad británica de Washington, se habían quejado en muchas ocasiones a las autoridades de que su vecina, una mujer de 49 años llamada Caterine Cartwright, era muy escandalosa en el lecho matrimonial.Dejaba que su cama golpease las paredes y emitía gritos y gemidos a un volúmen desorbitado.
El 17 de abril, un juez había emitido una ordenanza contra los comportamientos antisociales que le imponía no hacer ruido durante cuatro años, aunque se encontrase en su país de origen, que es Inglaterra. Pero en sólo diez días Carolina ha incordiado a los vecinos con prácticas sexuales muy escandalosas junto a su marido Steve a primera hora de la mañana.
La policía ha constatado la violación de la ordenanza y la ha arrestado. Permanecerá en el calabozo hasta el 5 de mayo. Después será procesada.
sábado, 2 de mayo de 2009
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