sábado, 30 de mayo de 2009

Mentiras y Represalias: Charlatanería de Estado


Por. Alberto E. Borda Objio.
Periodista dominicano radicado en U.S.A.

La desvergüenza y cara dura de los funcionarios del desgobierno que tenemos en la actualidad, raya en lo increíble y Ripley se maravillaría si pudiera observar la cachaza de los que dan la cara para justificar lo indefendible de la ineptitud de un gobierno que no le importa nada mas, que su mantenimiento en el poder caiga quien caiga. Sin importarle, que la credibilidad que debería gozar delante del pueblo, no desaparezca para siempre. Trayendo el consecuente daño para la democracia y la desconfianza del País en sus Instituciones.

La avalancha de justificaciones irresponsables y poco serias que hacen los que administran la cosa publica cuando se destapa cualquier escándalo de corrupción o de incapacidades en el manejo de aspectos gubernamentales y administrativos, ha llevado a la gente a no creer en nada de lo que le digan los que representan al pueblo como funcionarios al frente de los estamentos del Estado.

Es tanta las mentiras que ofrecen ante los requerimientos de la Nación estos charlatanes de la palabra, que ya la ciudadanía ni se inmuta cuando las autoridades buscan explicar el por que de las consecuencias que se suceden en cualquier situación que tenga que ver con la dirección u administración de instituciones o recursos del Estado.

Es que con el ejemplo del principal incúmbente del Palacio Nacional, es suficiente para dar al traste con la credibilidad de este desgobierno. Y lo que hacen los súbditos u acólitos del mayor representante de La Nación, es reiterar indecentemente las irresponsabilidades vergonzosas que diariamente se exponen a los dominicanos.

Remontémonos a las declaraciones del Secretario de Salud Publica en torno a la aparición del virus porcino o como se quiera llamar. Este funcionario, se canso de decir y reiterar desmintiendo a todo el que advertía de los riesgos de la pandemia para el País, aseguraba, que no existía dicha enfermedad ya que estaban cubiertas todas las posibilidades de riesgo y que estábamos blindados en materia de prevención contra la enfermedad.

Cuando llego su jefe de España, cambio totalmente el panorama que horas antes defendía a rajatabla el Secretario de Salud y empezó a ofrecer una versión diferente de los acontecimientos que se estaban sucediendo y que todo el mundo auguraba como grave para la ciudadanía. Y ahí están las consecuencias, colegios cerrados, muertes en diferentes partes del País y un desconocimiento garrafal por parte de la población pobre acerca del letal virus. Los que caigan victimas de esto, serán su responsabilidad.

En otro orden del panorama Nacional, existe la situación imperante en las cárceles o ergástulas de la Nación, saturadas de presos preventivos y vergonzosamente justificadora de privilegios y corruptela administrativa, unas circunstancias creadas y sostenidas expresamente por los que interactúan en torno a esto. Ya que de esa mala practica, se benefician todos los que están envueltos en la supuesta aplicación de los correctivos, llámense militares, policías, abogados, fiscales y casi todo el estamento judicial que decide y controla esta connivencia corrupta per se.

Haciendo que los actores principales de esta tragicomedia, se vean como mojigangas ante los ojos del pueblo, pues los hechos que tratan de justificar con sus mentiras y represalias a quienes denuncian los acontecimientos existentes, los retratan de cuerpo entero y en close up como lo que son; una partida de irresponsables que irrespetuosamente vulneran a quienes pagamos con nuestros impuestos los grandes salarios que devengan estos malandrines de la “administración publica” encabezados, por el que dirige esta banda de charlatanes, El Presidente de La Republica.

1 comentario:

  1. el dice la verdad es un estado sin leyes ni derechos para los jodidos y los k tienen k decir o anticipar los problemas lo callan para aparentar k to ta bien aunke el rancho este ardiendo y to t jodio

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