MANUEL E. AVENDAÑONUEVA YORK — El barrio dominicano de Washington Heights se levantó ayer para brindar su respaldo a uno de sus más queridos ídolos: Manny Ramírez, el pelotero de los Dodgers de Los Angeles que fue suspendido 50 juegos por uso de sustancias prohibidas en las Grandes Ligas.
“Es un error que cometió, pero creo que es necesario apoyarlo en estos momentos difíciles”, dijo Rafael Victorio, de 37 años, nacido en San Francisco de Macorís. “A él se le han hecho seis pruebas anteriores y nunca dio positivo, creo que va a salir bien de esto y no le va a perjudicar su futuro”, agregó el dominicano que vive desde hace 14 años en Nueva York.
Daniel Jiménez, de 20 años, señaló que ha habido mucha exageración en todo esto. “Todo deportista necesita medicarse por tanta exigencia física”, dijo. “Yo lo respaldo, sobre todo porque ha sido una medicina lo que él ha tomado”, agregó.
Para Pedro Santos, del pueblo de Villaduarte, Manny Ramírez “va a seguir dando palo, con sustancias prohibidas o sin ellas”. Agregó que la fanaticada de los Dodgers seguirá apoyándolo “porque es bueno, no importa que haya cometido este error”.
Araceli Pimentel, de Santo Domingo, señaló que el pelotero “no tiene la culpa de esto, porque fue algo medicado lo que tomó”. Sin embargo, dijo que él debió consultar si esta medicina contenía algo prohibido. “Yo lo apoyo ciento por ciento”, dijo la dominicana.
“Manny Ramírez merece que se le dé una oportunidad, al igual que a los demás”, dijo por su parte Eligio Rosa, un dominicano de 71 años de edad, nacido en Santiago de los Caballeros. “Por qué siguen más a los hispanos”, se preguntó para señalar finalmente: “es una exageración lo que han hecho”.
La esposa de Eligio, María, también dio su respaldo al pelotero dominicano. “Un error lo tiene cualquiera y debe seguir adelante”, dijo la mujer mientras atendía a su clientela de la calle 175 y Broadway.
manuel.avendano@eldiariony.com
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